Desde Sicilia hasta Stuttgart (Alemania), la familia Ragusa ha realizado durante el último tercio del siglo XX un viaje personal y una traslación del mejor arte de la cocina tradicional italiana y después, tras muchos años dando de comer a la mejor sociedad alemana, han recabado en España, concretamente en Orihuela Costa, y desde aquí siguen haciendo las delicias de todos los que acuden a su establecimiento.


“Tienes que creer en lo que haces”, nos dice Rosario Ragusa, patriarca de la familia. ”El éxito consiste en amar tu profesión, y saber lo que compras y lo que ofreces a tus clientes, productos frescos y buenos, y sentirte orgulloso de lo que haces”.


Empezamos a degustar un menú variado y consistente. Comenzamos con unas ostras fresquísimas y unos mejillones con una salsa marinera peculiar de suave aroma mediterráneo.

Inmediatamente la insustituible ensalada de búfala para dar paso al corazón del menú: dos platos de pasta, uno con bogavantes y otro con trufas, quizás las primeras de la temporada.

La forma de cocinar la pasta y la manera en que esos sabores se mezclan -primero en el plato y luego en la boca- son el misterio y la razón de ser de Casa Carmelina, un lugar protegido e inspirado por los dioses de la cocina.


“El arte de cocinar la pasta no deja de evolucionar”, según María Teresa Mónaco, nuera de Rosario y artífice de los suculentos platos que degustamos.” Son los cocineros los que con su imaginación crean nuevas recetas, utilizan nuevos ingredientes. Yo cocino una pasta con pesto de pistacho y tártar de gamba, por ejemplo, y también pasta con nduja, una sobrasada picante, muy típica de Calabria, y a la gente le encanta”.

Tomamos nota. A nuestro menú aún le queda un plato para redondearlo, un solomillo con foie de una textura y un sabor difíciles de superar.

Y los consabidos y espectaculares postres italianos, entre los que sobresalen un cremoso tiramisú y un refrescante helado de pistacho.


“Nuestro local es un restaurante familiar, en el que los clientes comen bien y se sienten bien”, nos dice Fabio Ragusa, hijo de Rosario y ahora al mando de la nave familiar. ”Nuestra carta es fundamentalmente cocina tradicional italiana, pero con un toque nuestro, que viene sobre todo de mi madre, Carmelina, que tenía un punto my especial a la hora de cocinar”.

Entre todas estas recetas italianas y relatos sobre los orígenes en la Italia profunda surge la figura de Carmelina, la madre, esposa, compañera y emprendedora que se aventuró a montar varios restaurantes a lo largo de su vida y en diferentes sitios, y que es una inspiración permanente para toda la familia. “Si hablo de ella se me humedecen los ojos, aún me emociono”, relata Rosario cuando le preguntamos por la mujer que le acompañó en su carrera profesional y su trayectoria gastronómica.


La mano de Carmelina aún se deja ver no solo en ese toque especial auténticamente italiano, sino también en la elaboración de la carta del restaurante donde podemos encontrar los famosos Spaghetti Ragusa, o los muy excitantes Puttanesca; el Risotto Porcini; la Pizza Diavola o la Pizza Calzone, sin olvidarnos de una extensa gama de tradicionales postres italianos.

Mención aparte merecen los vinos con los que hemos maridado este recorrido por la tradición culinaria italiana.

La gastronomía italiana tiene una merecida fama en todo el mundo, y sus platos permanecen en la memoria emocional de muchos de nosotros. Restaurantes como Casa Carmelina contribuyen de forma decisiva a que esos recuerdos y esos sabores nos sigan acompañando, esperemos que por mucho tiempo.

C/ J. Sebastián Bach, 2
Conjunto Valencia / Villamartín
03189 Orihuela
+34 628 202 865
casacarmelina.com
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