The Velvet Fork, recientemente inaugurado en Alicante, es un espacio moderno que destaca por su exquisito interiorismo. Cada detalle ha sido cuidadosamente seleccionado, desde los materiales hasta la paleta de colores. El color añil que domina las paredes contrasta de manera elegante con el verde de la barra, creando una atmósfera única que no pasa desapercibida. Desde el exterior, el restaurante llama la atención como si fuera un escenario donde los comensales se convierten en protagonistas de una obra en la que “ver y dejarse ver” es el verdadero argumento de la modernidad. Los fines de semana, un DJ se encarga de poner la banda sonora a las cenas, añadiendo el toque final a esta experiencia inmersiva.
El nombre, The Velvet Fork (literalmente “tenedor de terciopelo”), es un símbolo de delicadeza y lujo, evocando una experiencia gastronómica suave, elegante y sofisticada. Cada detalle del restaurante refleja esta combinación perfecta entre la sutileza y la exclusividad.
La simbología de “tenedor de terciopelo” va mucho más allá de lo que aparenta a primera vista. El terciopelo evoca suavidad y confort, junto con un lujo que nunca resulta excesivo. En The Velvet Fork, esta idea se refleja en cada detalle: desde los suaves sillones de terciopelo hasta la iluminación tenue, todo está diseñado para envolver en una sensación de elegancia y calidez. Cada plato no sólo ofrece una experiencia de sabor, sino también una presentación que invita a disfrutar de una sofisticación sutil y relajada, al igual que el propio ambiente que define al restaurante.
Un equipo joven y dinámico, liderado por Natalia, la propietaria del local, se encarga de que la función en The Velvet Fork sea perfecta para los actores-comensales. Eugenia, como jefa de sala y sumiller, se asegura de que cada detalle en el servicio sea impecable, mientras que Sebastián, bar-tender y jefe de coctelería, sorprende con sus creativas mezclas. Alex, eterno y querido camarero, es bien conocido en la escena de restauración alicantina por su experiencia en los locales más de moda, y está acompañado por Paula y Anna, quienes completan el equipo con su energía y dedicación. En la cocina, el talentoso chef ucraniano Eugeniy Orehov es el responsable de ofrecer una propuesta culinaria que refleja su maestría y creatividad.
Porque, ante todo, The Velvet Fork es un restaurante para disfrutar tanto de comidas como de cenas, y es en ese escenario donde Eugeniy Orehov ejerce su arte entre bambalinas. Su propuesta gastronómica se centra en una cocina moderna con toques de fusión, que refleja las tendencias actuales, pero manteniendo el respeto por la técnica. Destacan sus carnes, preparadas a la parrilla y en papillote, donde Eugeniy demuestra su maestría, dominando los puntos de cocción a la perfección. Cada plato es una muestra de la precisión y el conocimiento culinario que lo definen como chef.
El equipo de The Velvet Fork se encarga de cada detalle para garantizar una experiencia perfecta, permitiendo una completa relajación y disfrute del momento. Aquí se genera una atmósfera que hace sentir especial a cada visitante: no es sólo un lugar para descansar como en casa, sino un espacio donde sentirse incluso mejor. Cada interacción con el personal y cada elemento del interior han sido meticulosamente diseñados para brindar una calidez y comodidad inigualables, acompañadas de un toque de sofisticación y atención al detalle.
Como declaración de intenciones, publicaron en redes sociales: “Venimos para quedarnos y convertirnos en tu sitio de confianza en Alicante, donde podrás estar como en casa”. Yo lo corregiría y diría: “donde podrás estar mejor que en casa”. Con tantas ganas de hacerlo bien, ¡bienvenidos!
C/ Pintor Lorenzo Casanova, 11, Alicante
+34 681 860 385
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