El reinado del chef español Dabiz Muñoz, fundador y alma del restaurante Diverso ha llegado a su fin. Han sido tres años de hegemonía mundial y ahora, como suele ocurrir en las sagas reales, a rey muerto, rey puesto. El danés Rasmus Munk ha sido coronado como el mejor cocinero del mundo.
La ceremonia de selección y nombramiento de este nuevo monarca de los fogones ha tenido lugar en Dubái, en lo que ya se conoce como uno de los mayores eventos culinarios del mundo, la gala “The Best Chef Awards”, que este año ha cumplido su octava edición.
Este ha sido el ranking:
Rasmus Munk, del restaurante Alchemist, de Copenhague, Dinamarca. Ha sido elegido mejor cocinero del mundo por su enfoque vanguardista e innovador, mezclando elementos culinarios y teatrales y ofreciendo una experiencia inmersiva.
Este ha sido el ranking:
Rasmus Munk, del restaurante Alchemist, de Copenhague, Dinamarca. Ha sido elegido mejor cocinero del mundo por su enfoque vanguardista e innovador, mezclando elementos culinarios y teatrales y ofreciendo una experiencia inmersiva.
Albert Adrià, del Restaurante Enigma, en Barcelona, España. Ha obtenido la segunda posición. Hermano de Ferrán Adrià, los organizadores destacan que “su trabajo combina la narración con una técnica innovadora, solidificando su influencia en la industria”.
Eric Vildgaard, del restaurante Jordanaer, también en Copenhague. Jordanaer significa “con los pies en la tierra”, y eso es lo que caracteriza a este chef clasificado en tercer lugar, un hombre con un turbio pasado, ex pandillero, que ha encontrado la libertad en la cocina y cuya trayectoria profesional daría para escribir un guion cinematográfico.
La ceremonia de entrega de los galardones tuvo lugar en el Hotel Atlantis The Palm, un lugar icónico de Dubái, con una oferta gastronómica que abarca varios restaurantes de alto nivel y cuyas suites preferenciales tienen acceso directo a Aquaventure, el mayor parque acuático del mundo. A la gala asistieron más de tres mil personas, y se homenajeó a 550 cocineros de 61 países. Este evento sitúa a Dubái como una de las grandes capitales culinarias del mundo.
En esta ocasión, The Best Chef Awards han cambiado su sistema de calificación y votación para conseguir una evaluación más inclusiva, ética y representativa del talento culinario basado en atributos cualitativos. El nuevo sistema de atribuciones asigna a los chefs de uno a tres cuchillos para indicar el nivel de su maestría y su arte en los fogones. Este cambio permite una selección más amplia, diversa e integral, según los organizadores.
Entre los cambios más importantes podemos señalar el aumento del número de votantes de 350 a 568, incluidos 348 chefs y 220 profesionales; el podio para los tres mejores cocineros del mundo; la digitalización del sistema de votación y la introducción de una serie de categorías de premios especiales.
ntre estos últimos reconocimientos se concedió el premio de mejor pastelero a René Frank (Alemania); el de máxima creatividad a Paco Méndez, del restaurante Come, en Barcelona, o el de Ana Ros (Eslovenia), la más votada entre los profesionales.
Comienza un nuevo reinado, todo un año por delante en el que los galardonados van a poder disfrutar del título y sacar el provecho y la rentabilidad que esto conlleva. Por el momento les damos un dato: el menú degustación en el restaurante Alchemist, en Copenhague, cuesta 2.000 euros. Ya hay una lista de espera de un año.
En esta ocasión, The Best Chef Awards han cambiado su sistema de calificación y votación para conseguir una evaluación más inclusiva, ética y representativa del talento culinario basado en atributos cualitativos. El nuevo sistema de atribuciones asigna a los chefs de uno a tres cuchillos para indicar el nivel de su maestría y su arte en los fogones. Este cambio permite una selección más amplia, diversa e integral, según los organizadores.
Entre los cambios más importantes podemos señalar el aumento del número de votantes de 350 a 568, incluidos 348 chefs y 220 profesionales; el podio para los tres mejores cocineros del mundo; la digitalización del sistema de votación y la introducción de una serie de categorías de premios especiales.
ntre estos últimos reconocimientos se concedió el premio de mejor pastelero a René Frank (Alemania); el de máxima creatividad a Paco Méndez, del restaurante Come, en Barcelona, o el de Ana Ros (Eslovenia), la más votada entre los profesionales.
Comienza un nuevo reinado, todo un año por delante en el que los galardonados van a poder disfrutar del título y sacar el provecho y la rentabilidad que esto conlleva. Por el momento les damos un dato: el menú degustación en el restaurante Alchemist, en Copenhague, cuesta 2.000 euros. Ya hay una lista de espera de un año.