Una "cocina elegante" es aquella que no tiene estridencias en los sabores y éstos están equilibrados.
Es aquella donde las texturas juegan un papel importante sin prevalecer unas sobre otras.
Donde los colores del producto y las salsas aparecen mágicamente realzados en tonos pastel.
Es aquella en la que después de comer, volverías a empezar, porque te sientes ligero.
Esa es la alta cocina italiana y la nueva apuesta del restaurante Orobianco en Calpe (Alicante) desarrollada por Paolo Casagrande, chef del tri-estrellado restaurante Lasarte en Barcelona, junto a Martín Berasategui, en un proyecto particular para el que ha contado con un jefe de cocina de gran talento como Andrea Drago y en pastelería con Michele Crotta.
Un servicio de lujo, una bodega con vinos especiales y muy seleccionados y, finalmente, unas vistas espectaculares al Peñón de Ifach completan una experiencia única.